TESTAMENTO I
No fue la Pandemia, ni sus miles de muertos,
fue la vida, que machaca las calles cada día
y uno que otro recuerdo guardado en el baúl
con sus pasos, sus sombras y otras formas.
TESTAMENTO II
No lamento escuchar el silbido del aire
adosado a la tarde, mientras, los tordos vuelven,
casi sin darme cuenta se ha mojado mi rostro
¿empezó la llovizna, o es un llanto callado?
TESTAMENTO.III
No me gusta temprano, ni estar a medianoche
aunque puedo rezar allende Los Olivos sin dormirme,
o atender el llamado o las campanas, prefiero la oración
sin previo aviso, viene del corazón y no es lo mismo.
TESTAMENTO.IV
Puede ser la Mezquita, la Iglesia o la capilla, el árbol centenario,
un pasto verde, muy fresco y espaciado, una roca calcárea
cortada a tajo por la mano del hombre o el paso de los años
ahí yo rezaré, viene de tiempo atrás …porque es lo mismo.
TESTAMENTO V
Ante todo, la poesía libre es una forma de expresión poética. Quienes saben de esta materia piensan que se caracteriza también por su alejamiento intencionado de las pautas de rima y metro. Mientras que una que es menos versada en la materia pudiera pensar que como resultado, esta es una de las formas más sencillas, también tiene sus reglas. Como resultado de ellas, el poema busca caudales de ritmo y finalmente recurre al lenguaje subjetivo, connotativo. Se insiste en que deben ser especialmente relevantes sus palabras y expresiones, éstas pueden ¿o deben? incluir más de un sentido o interpretación. Finalmente, el lenguaje literario es figurado, es la forma en que recurre a metáforas, tanto como a símil y otras figuras literarias.
Autora